Juan se fue diez días de viaje por trabajo. Es así, cada dos meses tiene un viaje de trabajo y mi vida colapsa. El año pasado viajó seis veces. Este año ya viajó tres. El primer viaje fue un mes después de que trajimos a los bebés a casa. Para mí fue durísimo, porque no estaba organizada: no tenía rutinas ni tenía niñera. En ese viaje conocí la maravillosa figura de la
El lado oscuro de la ayuda
El lado oscuro de la ayuda
El lado oscuro de la ayuda
Juan se fue diez días de viaje por trabajo. Es así, cada dos meses tiene un viaje de trabajo y mi vida colapsa. El año pasado viajó seis veces. Este año ya viajó tres. El primer viaje fue un mes después de que trajimos a los bebés a casa. Para mí fue durísimo, porque no estaba organizada: no tenía rutinas ni tenía niñera. En ese viaje conocí la maravillosa figura de la